Vecinos que cuidan su barrio
El colectivo de arquitectos y diseñadores Boa Mistura siempre trabaja con tres premisas: el desencanto de lugares que parecen olvidados, el entusiasmo de algunos de sus habitantes y el ingenio. O lo que es lo mismo: la pobreza derivada de la especulación o la mala planificación, el inconformismo y los pocos medios.
Su último trabajo, en la Unidad Habitacional Infonavit Independencia de Guadalajara, en México, ha contado con el apoyo de los ayuntamientos de Guadalajara y Madrid, también con voluntarios de la universidad de la ciudad mexicana y con contribuciones de la empresa de pinturas Prisa, pero, sobre todo, ha contado con los vecinos del barrio. Fueron ellos los que idearon y materializaron la transformación de su plaza.
La comunidad no solo pintó los 5.000 metros cuadrados —tres edificios, dos fachadas y un enorme suelo— en uno de los puntos más deprimidos de la Colonia Infonavit Independencia, también ideó convertir ese suelo en una gran plaza para los vecinos. Y decidieron, naturalmente, a qué dedicar la plaza.
Para entablar relación con esos vecinos, Boa Mistura realizó encuestas y sometió sus propuestas a votación entre los vecinos. En Noviembre de 2017, cinco de esos ciudadanos que estaban en paro fueron contratados para formar parte del equipo que debía organizar a los pintores. Muchos otros vecinos se sumaron desinteresadamente a los estudiantes de la Universidad de Guadalajara para completar la transformación de la plaza.
La obra se apoya conceptualmente en la cosmovisión wixárika, un pueblo indígena mayoritario en el área de Jalisco y los Estados adyacentes, y recrea el nierika, un espejo transgeneracional que traslada la sabiduría de los antepasados a las nuevas generaciones. “El niérika permite a los wixaritari poner orden en su vida cotidiana, vivir en unidad en un mundo que, de otra manera, resultaría caótico e impredecible. También les permite relacionar el presente con el pasado, y, por esto mismo, vivir con conciencia de su historia para decidir su porvenir”, escribió la desaparecida maestra y escritora Luz Chapela. De ahí que “Fui, Soy y Seré” sean las palabras escritas, a modo de grito, en las fachadas que rodean la plaza.
Proyectos participativos, que implican a los vecinos y recuerdan la historia, hacen de los barrios más degradados lugares vivos que despiertan a los ciudadanos en lugar adoctrinarlos u olvidarlos.
No Comments